jueves, 11 de diciembre de 2008

LA TABERNA DEL ALABARDERO (SEVILLA)



LA TABERNA DEL ALABARDERO (****)
Zaragoza 20
41001 Sevilla
Telf: 954.502.721

www.tabernadelalabardero.es

Habitación: -
Fecha de entrada: 9/12/08
Tarifa: 90€/noche (Sólo Alojamiento)

Hacía un mes que a través de correo electrónico había gestionado la reserva de una habitación doble de uso individual en este histórico hotel Sevillano. Nos cruzamos varios correos más en los que me solicitaban los datos de una tarjeta de crédito para garantizar la reserva...

La noche de mi llegada, desde Barajas, y viendo que Iberia retrasaba dos horas largas la salida del vuelo IB0100 con destino Sevilla decidí llamar al Hotel para avisar que llegaría pasadas las 3 de la madrugada. Anotaron mi comentario y por fín volamos a Sevilla.

Cuando el taxi enfila la calle Zaragoza y veo el edificio del hotel excesivamente oscuro y apagado me siento hundido. Pero cuando el taxi para junto a la puerta y los enormes portalones de madera están cerrados, entonces no me hundo sino que casi lloro. Llevo casi 22 horas levantado y necesito una cama ya. Quizá el taxista está más contrariado que yo, así que entre los dos empujamos la puerta, golpeamos los pomos, pero allí no abre nadie.

Vuelvo a llamar por teléfono y entonces alguien me contesta. Les digo que estoy fuera. Entonces abren la puerta tres personas. Todo el interior a excepción de la diminuta recepción están a oscuras. Me explican que ha habido un fallo en la electricidad del hotel y que no me pueden dar habitación, pero que me han reservado otra habitación, a 120€ en el vecino Vincci La Rábida.

A la mañana siguiente recibo tres llamadas en el buzón de voz de mi móvil de la jefa de recepción, del gerente y de la relaciones públicas de la Taberna para invitarme a comer, tomar el aperitivo o volver a dormir al hotel. No les contesto porque tengo mucho trabajo estos días, pero ¿qué quiere que le diga?. Mi mejor profesor de marketing me enseñó que "no hay una segunda oportunidad para una primera impresión". Tampoco soy tan rencoroso.

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