viernes, 31 de octubre de 2008

CATALONIA EXCELSIOR (VALENCIA)



Hotel Catalonia Excelsior (***)
Barcelonina 5
46002 Valencia
Telf: 963.514.612
Fax: 963.523.478

excelsior@hoteles-catalonia.com
www.hoteles-catalonia.com

Habitación: 209
Fecha de entrada: 29/10/08
Tarifa: 90€/noche (Sólo Alojamiento)

Casi en la misma plaza del Ayuntamiento y rodeado de otras opciones de alojamiento más lujosas y no mucho más caras, en un edificio clásico color albero la cadena Catalonia gestiona este clásico hotel valenciano tras haberlo sometido a una ligera reforma.

Desde la entrada vemos que aquello que lo de completamente reformada no es del todo cierto. Viejas e incómodas puertas de cristal nos dejan en una recepción con el mostrador a la izquierda, una ruidosa cafetería a la derecha y tras unas escaleras los ascensores. Luz abundante pero poco acertada que da una sensación de frialdad excesiva.

El trato en recepción es sencillamente lamentable. Hay una justificación, que es que el recepcionista nos dice que es nuevo, pero se lía al hacer el check in: aunque ya había enviado todos los datos por email (tarjeta incluída) he de volver a darle todo de nuevo. Nos asigna unas habitaciones y luego las cambia, no sabe la clave (sencillísima por cierto) para conectarse al wifi gratuito que ofrece el hotel...

Por fin, tras salvar cuatro escalones, subimos por unos viejos ascensores bastante correctos hasta la habitación. Los pasillos no han sido reformados. Quizá las cerraduras de las puertas. Tras la puerta suelo porcelánico, paredes color crudo y zócalos hasta media altura de madera. A la izquierda la puerta del baño. De frente el dormitorio, con suelo de parquet nuevo muy agradable.

La sensación de conjunto es penosa. Dos camas estrechas separadas por una enorme mesilla en el centro, se apelotonan con un maletero y un escritorio abarrotado con un enorme y antiguo televisor y un montón de cartelitos del hotel. Sobre las camas un cuadro pasado de moda, se pega con los colores morados del cubrecama y de las cortinas. La sensación de rancio se acentúa con el estrecho y oscuro armario empotrado de puertas correderas al que resulta complicado acceder porque la cama queda demasiado cerca.

La cama resulta confortable, y la lencería cuidada, aunque la almohada es más estrecha que la cama, que de por sí ya lo es. El aire acondicionado funciona perfectamente en el formato auto, aunque el ruido es excesivo como para dormir con él encendido. La insonorización hacia fuera es buena, y a eso se le añade que la habitación da a una calle peatonal de poco tránsito. La insonorización hacia dentro es bastante peor. Se escuchan los pasillos y los baños cercanos. El foscurit es manifiestamente corto, y es imposible cubrir con él todo el vano de la ventana, por lo que la luz entra de forma molesta justo delante de nuestra cara.

El escritorio es estrecho para trabajar, pero dispone de enchufes para el portátil. La luz en general resulta pobre y especialmente para trabajar. En la cama, tan sólo una lampara situada sobre la caduca mesilla.

El baño es correcto pero la decoración pasadísima de moda. Mármol marrón claro en paredes y suelos. Un lavabo con un enorme espejo, inodoro, bidet y bañera. Tanto caudal como presión y temperatura en lavabo y ducha son absolutamente correctos. La ducha se cierra con una antihigiénica cortina de tela con el logo de la cadena. Toallas justas de tamaño y escasas de calidad. El set de amenities es cortito: dos pequeños frasquitos de gel/champú, una pastilla de jabón, un limpiacalzado y un set de kleneex. Presentación corporativa pero calidad escasita.

Por la mañana la despedida es igual de torpe que la bienvenida. Han de hacer dos facturas para dos habitaciones porque "el sistema no me permite sumar las dos habitaciones en la misma factura".

Calidad/precio: 6.5
Servicio: 3.5
Habitación: 5.5
Baño: 4.5
Estado de Conservación: 3.5
Valoración General: 5

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