lunes, 14 de abril de 2008

PETIT PALACE GERMANIAS (VALENCIA)



Petit Palace Germanias (***)
Sueca, 14
46006 Valencia
Telf: 963.513.638
Fax: 963.513.683

germanias@hthoteles.com
www.hthoteles.com

Fecha de llegada: 13/04/08
Habitación: 306
Tarifa: 140€ (Sólo Alojamiento)

Si mientras el taxi te acerca al hotel contemplas por la ventanilla decenas de tiendas árabes, chinas... Si las casas aparecen semiabandonadas, sucias... y si mientras estás bajando las maletas del coche delante de la puerta del hotel ves a tres tipos árabes trapichando con droga, a otros pasándose paquetes a través de una papelera sostenida a un semáforo, y un grupo de jóvenes corriendo delante de la policía deseas meterte en el hotel cuanto antes y no salir hasta la mañana siguiente, por muy malo que el hotel sea, lamentando haber elegido aquella zona para descansar. Pero es lo que hay.

A pocos pasos de la estación del tren de Valencia HT apuesta por un hotel siguiendo los estándares de la cadena. Tras la puerta, un espacio que hace de sala de recepción, mostrador, restaurante, cibercorner... nos conduce hasta el mostrador donde la recepción es sorprendentemente cordial y rápida.

Un inestable y oscuro ascensor, muy repetido en los hoteles de la ciudad y en varios de la cadena, nos lleva hacia las habitaciones. Por el pasillo, de suelo de moqueta entre gris y negro y paredes blancas, ya vemos que la insonorización no va a ser la reina de la noche, porque escuchamos casi todas las conversaciones de las habitaciones vecinas. El suelo, en algunos tramos "se hunde" ante nuestros pies, como si el parquet que se usó para los pasillos, y luego se cubrió de moqueta hubiera cedido.

Una enorme puerta blanca nos mete de lleno en la habitación. Muy luminosa, como no podría ser menos en Valencia, con dos balconcitos a las "peligrosas" calles. Tras el recibidor y la puerta del baño, la estancia se presenta amplia. Dos camas enmarcadas por dos mesillas y un cabecero rematado con un espejo. Terribles flexos sobre las mesillas para iluminar en la noche. La cama resulta confortable, pero las sábanas son excesivamente ásperas e industriales, lo que las llega a hacer incluso incómodas. Junto a estas, dos camas formando litera para los peques de la casa. Difícil revolverse tanta gente en tan poco espacio.

Una estrecha mesa de cristal ofrece un portátil con wifi gratuito y una televisión de plasma. Debajo, el minibar.

Ni el foscurit cierra bien, ni el AC calla en su impulso de aire, ni los vecinos cesan su charla hasta las mil de la noche, así que el descanso a los de "sueño ligero" se hace cuesta arriba. Menos mal que tenemos trabajo, y libros.

El baño es pequeño para tanta gente. Muy en la estética de la cadena. Cristal y acero por todos los sitios. Resulta llamativo que a una habitación familiar le pongan una puerta de cristal al baño, porque claro, al mínimo descuido resulta difícil ducharse sin la mirada de alguno de los niños. Aunque con los tiempos que corren, igual para algunos eso es "normal".

Amenities abundantes, y toallas agradables aunque contadas. La temperatura es fantástica pero la presión en la ducha es manifiestamente mejorable.

Menos mal que la despedida en recepción resulta también agradable, cordial, eficaz y rápida. El sol de la mañana tampoco ayuda a mejorar la sensación de suciedad e inseguridad de la calle.

Calidad/precio: 6
Servicio: 6
Habitación: 7
Baño: 6.5
Estado de Conservación: 6.5
Valoración General: 6.5

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